Argelès-sur-Mer es una famosa localidad del sur de Francia. Situada en el departamento de Pirineos Occidentales pertenece a la región de Occitania. Su nombre Argelès deriva de la palabra francesa “argile” (arcilla), ya que la ciudad fue construida sobre suelo arcilloso. La historia nos explica que el territorio fue habitado desde la prehistoria, que cobró importancia en la época feudal, dependió del condado de Barcelona, estuvo integrado en la corona de Aragón y que a partir de 1659 pasó a pertenecer a Francia.
El municipio de apenas 10.000 habitantes se extiende entre el mar Mediterráneo y la falda del macizo de Les Albères. A 25 kilómetros de Perpignan y unos 30 de la frontera, está perfectamente comunicada con España con los trenes de alta velocidad Renfe-SNCF en Cooperación y el aeropuerto de Perpignan. Ofrece al viajero sol durante los 300 días del año, lo que la convierte en un lugar predilecto para los amantes de la playa que combina con un rico patrimonio cultural y todo tipo de actividades acuáticas o relacionadas con la naturaleza.
Destacan sus 7 kilómetros de costa de aguas cristalinas galardonada con la bandera azul, y un paseo marítimo de 1,6 km de longitud flanqueado por árboles y jardines que acoge cada año la exposición del festival Argelès Photos Nature, en torno al océano y su preservación. El puerto deportivo es un paraíso para los navegantes y aficionados al buceo. Lleno de tiendas y restaurantes aglutina la vida social de la ciudad. Además, durante la temporada estival ( martes y viernes) se instala un mercado nocturno en el muelle del puerto.
Pero… Estas maravillosas playas que en la actualidad son un paraíso, en el pasado acogieron el drama de miles de refugiados republicanos que huyendo de la guerra se convirtieron en prisioneros en un campo de concentración improvisado a orillas de ese mar azul y transparente que tanto valoramos hoy en día. El viento, la arena, el mar y como techo el cielo fue lo que acogió a unos exiliados que tenían como único delito huir de la guerra. Esa etapa corresponde a un pasado que forma parte de nuestra memoria histórica y que como tantas tragedias provocadas por el hombre tiene que servir únicamente para que jamás se vuelvan a repetir. Para conocer los pormenores de este suceso se puede visitar el l Museo Memorial del Exilio.
La población de Argeles-sur-Mer, con su gran boom turístico ha experimentado interesantes cambios pero mantiene su núcleo histórico casi intacto. En ese entorno está ubicada la iglesia de Notre–Dame del Prat de estilo gótico meridional construida en el siglo XIV y declarado Monumento Histórico. Uno de los elementos más atractivos del templo es su campanario al que se puede acceder, para contemplar unas excelentes vistas del pueblo.
Argeles es un pueblo tradicional con una gran influencia catalana que se aprecia en todos sus rincones, su toponimia, cultura, celebraciones como los carnavales, la verbena de Sant Joan y en sus festivales donde se hacen demostraciones de castellers y se bailan sardanas. Además de los eventos culturales que marcan la temporada turística, los visitantes pueden descubrir los sabores catalanes a través de sus productos: frutas, aceite de oliva, quesos, vinos y mariscos, entre otros. Algunas especialidades de la zona son los Bunyols (buñuelos), la Tapenade (pasta de aceitunas machacadas), las cerezas y el pescado fresco.
El museo Casa de l’Albera situado en el centro del pueblo e instalado en una casa tradicional, alberga una exposición permanente que da a conocer, el territorio de Argelés y el macizo Albères su historia, cultura, tradiciones, su rico patrimonio y paisajes, a través de fotografías, videos y muchos objetos.
En la parte sur de la villa encontramos la antigua aldea de pescadores El Racou, de callejones arenosos, con casas típicas llenas de árboles y flores. Desde El Racou podemos realizar una caminata costeando hasta la vecina población de Collioure (un pintoresco pueblo pesquero). Un recorrido de apenas una hora y media disfrutando de diferentes parajes. El regreso se puede realizar en un barco que comunica las dos poblaciones.
El macizo de Les Albères tiene más de mil metros de altitud sobre el nivel del mar. Ofrece una gran variedad de paisajes y senderos, Uno de ellos conduce a la Torre de la Massana, desde donde se pueden contemplar las espectaculares vistas de la llanura del Rosellón y de la costa y descubrir su gran variedad de flora y fauna, entre ellas un hayal declarado Reserva Natural. En este entorno destacan las ruinas de la Abadia de Valbonne un antiguo monasterio cisterciense. La ermita de Saint Ferréol de la Pavé que data del siglo X clasificado como monumento histórico y el Château de Pujol, del siglo XII. La iglesia románica de Saint-Laurent-du-Mont, es otro de los tesoros que esconde el macizo. Fue construida en el siglo XII, totalmente de piedra, para atender las necesidades de los granjeros de las colinas.
De visita obligada es el circuito botánico del Parc Municipal de Valmy, cinco hectáreas de vegetación con gran variedad de plantas. En medio de estos parajes emerge majestuoso el Château de Valmy construido a finales del siglo XIX de estilo art déco. Situado entre viñedos, también ofrece alojamiento, desayuno y restaurante. Cuenta con 5 habitaciones, se pueden visitar sus bodegas, probar sus vinos y descubrir la historia apasionante del lugar. Además todos los años durante el mes de julio, a los pies del castillo se celebra el festival Les Deferlantes, dedicado a la música actual.
Otras excursiones para descubrir la historia de la zona es hacer un itinerario pasando por el dolmen de la Cova del Alarb y el dolmen de Collets de Cotlliure. También podemos visitar sus dos magníficas reservas naturales la Reserva Naturales de Mas Larrieu y la Reserva del Bosque de la Massane, con cientos de especies vegetales y habitadas por cerca de un centenar de aves, mamíferos e insectos en peligro de extinción.
Esta conocida estación balnearia de la Costa Vermeille como buen destino vacacional completo, cuenta con 5 parques temáticos, centros comerciales, boutiques, boleras, billares, bares musicales, discotecas, casino etc.
Debido al gran número de visitantes que atrae la población de Argelès–Sur–Mer existen todo tipo de alojamientos. Puede ser una casa móvil, una cabaña o incluso un bungalow tahitiano frente al mar. Sus 53 camping, entre los que están los mas bonitos de Francia, le otorgan el título de capital europea de la acampada. Situados en entornos privilegiados son respetuosos con la naturaleza e invitan a la calma y la desconexión. También hay una gran cantidad de hoteles de alta calidad y restaurantes especializados en todo tipo de comidas que cubren las necesidades de cualquier perfil de viajeros. Fotos: Oficina de Turismo de Argeles-Sur-Mer
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El Cajón de Lady Pepa, es un espacio donde caben noticias de cualquier ámbito. En está página hablaré de temas que para mi sean interesantes al margen de si son o no actualidad. Es mi espacio, y quiero que sea un reflejo de lo que me apasiona, de lo que me molesta y lo que me sorprende. Me interesa la moda, me gustan los viajes, pero sobre todo admiro a las personas que con sus ideas e iniciativas ayudan a crear un mundo mejor.
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